viernes, marzo 15

HABÍA UNA VEZ...¡UN CIRCO QUE ALEGRABA SIEMPRE EL CORAZÓN!

¿Cómo están ustedes?

El día 26 de febrero algo ocurrió en el cole. Había fieras por los pasillos, payasos por las escaleras, domadores y domadoras en el despacho, chicos que solo se comunicaban con mímica, arlequines que se hacían notar, chisteras de las que salían conejos... 
¿Era pura magia? Sí, era carnaval.



¡Quédate a leer, te vamos a sorprender!
Este año se ha optado en el cole por disfrazarnos todos siguiendo una misma temática, en este caso, ¡el circo! Y vaya si se montó el circo en el cole, fue pura magia, ritmo, alegría, risas, sorpresas...

Los más pequeños del cole, los niños/as y las seños de Infantil llenaron de color el cole con sus trajes de lunares, rayas, sus pelucas rizadas llamativas, y las preciosas narices de payasos. Visitaron todas las clases del cole y pasearon por todas las dependencias del mismo. ¡Estaban preciosos!








Si pasamos al primer ciclo de Educación Primaria, los arlequines se hacen notar por el colegio con el sonido de sus cascabeles y el color llamativo de sus trajes amarillos confeccionados en clase por las maestras y ayudadas por el alumnado. ¡Y vaya maquillajes! ¡Fabulosos!




 





Los alumnos/as del segundo ciclo de repente "hacían chas y aparecían a tu lado", y es que...con sus abracadabras podían hacer la mejor de la magia. Os hablamos de nuestros magos y magas, ¡demos bienvenida a las capas, varitas y chisteras!








Y llegaron los niños y niñas del tercer ciclo, que se identificaban por su pasear discreto y silencioso, con sus gestos y colores neutros, tirantes, boina y guantes blancos. Nuestros mimos estaban muy bien caracterizados y...como veis, ¡muy sonrientes!









Y por último, agarraos a los asientos, a la mesa, porque...¡llegan las fieras del cole! Los mayores de la ESO fueron las fieras del cole, con sus maestros/as como domadores de los mismos. Había leones, osos, monos...¡vaya cantidad de animales! Ahora, en nuestro circo están perfectamente tratados, nosotros luchamos por el buen trato hacia los animales.






Y tras haber desfilado cada ciclo junto a sus maestros/as ante el resto de compañeros/as, llegó el momento de disfrutar de un ambiente de circo, bailando y saltando con toda la energía que un circo requiere. ¡Lo pasamos genial!, y los que más se divirtieron fueron los más pequeños.




Y con el circo tan bonito que creamos, guardamos los disfraces hasta el año que viene.

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