Se os va a hacer la boca agua con esta entrada, y es que los niños y niñas de 6º de Educación Primaria se han puesto el mandil y el gorro de cocineros para realizar una receta en inglés.
¡Ha sido genial! ¿Queréis verlo?
Aprovechando la unidad "Food for friends", nos propusimos trabajar de forma divertida los alimentos, los pasos de una receta y toda la gramática que necesitamos para poder indicar cantidades de ingredientes.
Para ello, teníamos previsto realizar dos dinámicas.
Una de ellas era hacer una receta en clase todos juntos, para aprender cómo se hace una receta y cómo se escribe paso por paso. En esta ocasión fue la maestra de inglés quien proporcionó todos los ingredientes para poder hacer la receta en clase y degustarla ese mismo día.
Decidimos cocinar "Ham and cheese mug cake" y la verdad que fue bastante bien.
¡Y nos encantó, aunque a unos más que a otros para ser sinceros!
La segunda actividad era que, una vez estuviera la clase dividida en grupos, cada grupo eligiese una receta y, en casa, la escribiesen en inglés, la cocinasen mientras la iban narrando en lengua extranjera y la grabasen para verla en clase. Se les brindó también la oportunidad de traer la receta a clase cocinada para compartirla con sus compañeros y compañeras. Como norma principal, usar pocos ingredientes y, en caso de tener que usar electrodomésticos peligrosos como el horno, el fuego o la vitrocerámica, que fuesen ayudados por algún adulto.
La verdad es que esta segunda actividad salió fantásticamente bien. A pesar de que hay algún error en la redacción de las recetas (totalmente comprensible ya que la hicieron solos sin ayuda), fue fantástica la capacidad de compromiso y responsabilidad por parte de todos los niños y niñas, que aceptaron perfectamente la posibilidad de equivocarse, les pareció divertido grabarse y compartirlo con los compañeros (¡fuera vergüenzas!), y además tuvieron muy en cuenta las alergias e intolerancias alimenticias de sus compañeros así como sus gustos a la hora de escoger qué receta realizar.
Esta actividad fue solamente una excusa para poder divertirnos mientras aprendemos, ya que llevó un proceso de búsqueda de recetas por parte del alumnado, trabajaron la competencia lingüística desde el plano escrito a la hora de redactar la receta, y la destreza oral al enfrentarse a una cámara y narrar el proceso de la receta. ¡Nos divertimos jugando en clase!
Por último, y no menos importante, agradecer a las familias que han colaborado grabando el vídeo cuando los protagonistas tenían las manos en la masa, que han ayudado cuando han tenido que usar el horno o el fuego. Nos encanta compartir experiencias con vosotros. ¡Gracias!
Y ahora sí, su puesta en escena, el resultado final, lo compartimos con vosotros.
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